| Los canguros no son los únicos animales con bolsillos. En el desierto chihuahuense hay tres grupos principales de roedores que tienen mejillas profundas como bolsas de ambos lados de la boca. Uno de los grupos de roedores que viven en este desierto son las tuzas de bolsillo (ardillones abazón), las cuales pasan la mayoría de su vida en túneles debajo del suelo. Su comida principal consiste en raíces, tubérculos y otras exquisiteces subterráneas que guardan en sus cachetes para transportarlos al lugar donde esconden su alimento. Los ratones abazón y las ratas canguro, que son parientes lejanos de las tuzas de bolsillo, llevan una vida muy distinta. Aunque excavan madrigueras para refugiarse, estos roedores nocturnos recogen semillas, su principal fuente de alimento. El recoger semillas en el desierto quiere decir que con frecuencia estos roedores se aventuran lejos de la vegetación protectora, llegando a áreas abiertas en donde los mamíferos pequeños son especialmente vulnerables a depredadores como búhos, coyotes y zorros. La capacidad de guardar rápidamente semillas en su recipiente portátil de almacenamiento quiere decir que estos mamíferos se exponen durante un tiempo mínimo antes de regresar presurosas a la relativa seguridad de su guarida.
Colaborador: Arthur H. Harris, Laboratorio de Biología Ambiental, Universidad de Texas en El Paso. El Diario del Desierto es una coproducción del Museo Centennial y KTEP, Radio Nacional Pública en la Universidad de Texas en El Paso.
Dipodomys merriami. Rata canguro de Merriam. Fotografía por Dr. Lloyd Glen Ingles. © 1999 Academia de Ciencias de California.
Traductores: Richard R. Ford y Genny Mooser. |