| Durante miles de años la gente y los perros se han unido para ir de cacería. A este tipo de relación que se da entre distintas especies y que beneficia a ambas se le da el nombre de mutualismo. Según la opinión de algunos, el coyote, que es como otra clase de perro, tiene una relación así con el tejón. El agudo sentido del olfato del coyote y la incomparable habilidad para escarbar del tejón los convierten en "socios ideales". De acuerdo con esta creencia, el coyote encuentra las madrigueras abandonadas de los coyotes y el tejón se encarga de remover la tierra para que puedan los dos compartir el fruto de la caza. Otras personas son más escépticas creen que el coyote sabe que seguir al tejón le traerá suculentas recompensas. En el momento mismo en que el tejón escarba para sacar a su desafortunada presa se le presenta al coyote la gran oportunidad de arrebatarle la cena. Por lo tanto, tiene que haber dos víctimas--el roedor, que pierde su vida, y el tejón, que pierde su comida. ¿Se trata de un caso de mutualismo o de robo?
Colaborador: Arthur H. Harris, Laboratorio de Biología Ambiental, Museo Centennial, Universidad de Texas en El Paso. El Diario del Desierto es una coproducción del Museo Centennial y KTEP, Radio Nacional Pública en la Universidad de Texas en El Paso.
Lado izquierdo: Coyote (Canis latrans), fotógrafo: Lloyd Glenn Ingles. © 1999 Academia de Ciencias en California. Lado derecho: Tejón (Taxidea taxus), fotógrafos: Gerald and Buff Corsi; © 1999 Academia de Ciencias en California.
Verts, B. J., and L. N. Carraway. 1998. Land Mammals of Oregon. University of California Press, Berkeley, 668 pp.
Traductores: Richard R. Ford y Genny Mooser. |